Fotografía de Jesús Mari Arruabarrena.
El encierro de San Fermín es una cosa seria. Normalmente no se llegan a producir desgracias mortales, pero los toros no son ovejas con cuernos como más de un imprudente cree. Además a las corridas de toros de San Fermín traen a los ejemplares más grandes, por eso se denomina la feria del toro.
Para correr el encierro bien hay que estar preparado y son pocos los que se colocan delante de las astas. La mayoría son como los extras de una película: se caen, estorban, ponen en peligro a los demás y así mismos. Mi particular experiencia es esa. He corrido varios encierros y viendo que no iba a pasar de ser un espectador en el recorrido decidí dejarlo.
"The running of the bulls" dicen los forasteros sin saber la diferencia entre un toro y un cabestro. De hecho inmortalizan sus veloces carreras delante de los bueyes de cola.
Pero como en la imagen se ve, es cosa seria. Nosotros vamos a sacar las fotos pero si alguien del taller San Fermín Street Photographers quiere correr un encierro y viene a Pamplona con esa intención yo no seré quien se lo impida. Eso si, le haremos las pertinentes pruebas de alcoholemia.
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